03 enero 2008

DISOLUCIÓN DEL VESTIGLO.





Conspiración de fuego y ceniza
he venido siendo en la memoria de la historia.
Vago sabor de sal expelido por el mar evaporado
dentro de la travesía rumorosa de una vena por el cuerpo,
barro aglutinado en el volcán de un cerezo
tiritando de frío en la silueta,
llama de desvelos en la mirada ciega
de un fantasma puesto en mi pupila.


Soy un masónico ritual de minerales
acrecentando la muerte en forma de esqueleto,
despilfarrando sueño en la conjura de la hoz
presentida desde siempre por el cuello,
estoy atado a nudos de iniciados
que fueron cicuta
apaciguando
en el ágora una lengua
y tengo,
en mi confabulada relación de polvo y tiempo,
los huesos de la palma de la mano
aún fracturados por los clavos.


¿En serio puedes creer que nací aquí
cuando el espejo apenas logra señalar
los borrosos cadáveres que vistieron esta brisa?

2 comentarios:

Iñigo dijo...

Jugoso poema.
Y yo que había entrado solo por hallar dastos sobre la palabra "vestiglo", única rima que he encontrado para "siglo".
Te pongo en mi lista de favoritos y te voy leyendo

ZEUXIS dijo...

Muchas gracias Inigo, conquistador de tierras exóticas.
Espero tus comentarios y espero también comenzar una relación cordial, ya sea literaria o meramente y mejor aún, humana.