13 enero 2012

En la distancia.



“Tal vez sólo fue esa costumbre de acariciarnos así,
de imaginarnos así,
en secreto”
José Carlos Becerra


Para enamorarnos nos bastó existir
Y soñarnos arrullando tantos besos.
Raro parecía ofrendar en lo cianosos
Laberintos de la noche y compartir


Arriesgándolo todo a una sombra
El afán de amar y estar seguro.
Pero es maravilloso ser cartero
Y quizás pensar que la palabra siembra


Como antes cuando lograba al impartir
En tus ganas la partida y el regreso.
Todo lo ensayamos para asentir,


Para corroborar y señalar el beso.
La noche pasó siempre así por la ventana
Cuidando nuestro amor entre su aduana.

1 comentario:

Reptante dijo...

Me siento hasta raro comentando en un Blog, le perdí la fe, me perdí la fe y les perdí la fe. Pero acá ando y qué curioso es ver de inicio un verso entre los versos perdidos que he estado leyendo estos últimos días del maestro José Carlos Becerra. Es más, en una de esas... hasta sospechoso.

Pero heme aquí que toco con mi magia ponzoñosa tu espacio y alabo sin alabar lo que un chispazo produce. Lo que una inspiración tardía, o demasiado temprano hace, cuando una voz nombra, cuando un tiempo preciso toca, cuando dos cosas hacen y producen de las palabras una efímera nota, un intento primario de sinfonía. Buenas letras, buenas sensaciones, las que "En la distancia" se palpan.