18 abril 2011

Oficio de poeta




Al entrevistarlo llevaba un revolver y un cuchillo…
- Por si las moscas (dijo)
Nadie se atrevió a dudar de su poesía
Mientras desollaba una recién nacida
(quizás solo era el viento llorando entre sus manos)

- A alguien maté mientras venía y quizás
El o ella merecían vivir más que yo.
Ahora debo a cada partícula de nada lo que los otros
hubiesen logrado con mejor inutilidad.
Mis palabras sólo son óbolos.
Los días son el descuento de mi deuda:
Pronto sabré si valió la pena
Haber llegado antes.

Luego limpió el cuchillo entre su lengua
Sacó el revolver y comenzó a dispararnos.

No hay comentarios.: